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sábado, 5 de julio de 2008

Un día, a la vez....

Gracias por enseñarme que la vida esta llena de la plenitud con la que deseamos vivirla
que no depende de tus brazos, ni tus deseos, ni de tus sueños.
Sino de mí.
Y cada día inicialmente se desnuda en la simple premisa de un deseo


Solemos desearlo a los demás,
ese deseo de un buen día,
comencemos por murmurarlo a la persona
que se refleja en el espejo cada mañana.
Luego vestida de luces cargada de esa energía vital
será preciso iniciar el camino con un



Esa mañana que esboza el inicio de los sueños
que fuimos dando forma y cuerpo durante la noche.
Y siempre contagiados de esa sonrisa
que nos da la vida cada mañana
En ese transcurrir del tiempo que nos prela para entonces
sentir que la mañana finalizo
y la magia continua con un

De cada experiencia vivida y compartida
cierto es que ella, se convierte en lección.
Pues la vida se compone de ese constante aprender
para crecer en esencia.
Buenas o malas, siempre tendremos la certeza
que de ellas algo bueno aprendimos.
Aunque sea no caminar descalzo en un banco de cangrejos.
Y ese reloj indetenible sigue su rodar
pues el tiempo no es lineal

Llega el instante dónde disfrutamos del descanso
de ese sonreír por lo que logramos
de reflexionar sobre lo que hicimos bien o mal
pues cada tropiezo, éxito siempre será
un paso en el camino del vivir, un intento de huella.
Sólo entonces podemos entender el verdadero sentido del vivir
con un deseo alongado en el tiempo

Para desear una hermosa Semana, llena de la magia con la que la deseamos
cubrir, llenando nuestro ser con cada instante en el que atesoramos
nuestro mejor empeño en la edificación de nuestros sueños y proyecto de Vida.
Sin dejar de dar relevancia a lo que realmente es importante
Las personas son el tesoro más preciado
y el verdadero sentido de nuestro existir.
María Lasalete Marques ®